Las hadas son personajes míticos que se asocian con el concepto de protección, debido a que en muchos cuentos y relatos antiguos se les ve como unas criaturas capaces de conceder deseos a sus apadrinados.
Expertos comentan que las personas que habitualmente aseguran soñar con hadas son individuos muy delicados y que además poseen muchísima creatividad. También afirman que el observar a uno de estos seres durante la fiesta, es señal de que vienen cambios positivos en el futuro próximo.
Uno de los sueños que me platicó un amigo mío, que desde luego tiene que ver con el tema de las hadas, fue en el que se encontró en un paraje repleto de estas criaturas. Me contó que sus formas y tamaños eran muy distintas, pero que en ningún momento sintió temor al entablar comunicación con ellas.
Lo cierto es que el diccionario de sueños no revela que esto es síntoma de una autoestima bien cimentada. Dicho de otra manera, se trata de una persona capaz de encarar cualquier eventualidad con la disposición no solamente de solventarla, sino de obtener una enseñanza que se pueda aplicar en otra situación similar.
Si vemos que un hada se acerca a nosotros y súbitamente se aleja, quiere decir que inconscientemente requerimos que un cambio llegue a nuestras vidas.
En el supuesto de que estemos charlando amenamente con una de ellas, simboliza la necesidad que tienen algunos de desahogarse con otros. Hay veces que llevamos sobre nuestras espaldas confesiones que nos pesan cual si fueran pesadas cadenas. Es por eso que conviene de vez en cuando desahogarse conversando con un buen amigo.
Finalmente, les decimos a los que han soñado con hadas por mucho tiempo, que lo mejor que pueden hacer es dejar de ilusionarse por esa meta inalcanzable que pese a todos los esfuerzos jamás llega. Puede que te estés perdiendo de una gran oportunidad, por estar enfocándote en actividades que no valen la pena.